Nos encontramos ante un clásico, como son las albóndigas, a las que le vamos a dar una vuelta. Las tradicionales bolas las haremos con pescado, en este caso merluza, aunque podría ser cualquier otro tipo de pescado sin espinas y con un curry verde, le vamos a dar un toque thai muy oriental. Pero ahí no acaba la cosa. Para hacer el plato distinto y darle un aire canalla, vamos a añadir unas alcaparras, bimi y mazorquitas de maíz. En principio, parece una combinación imposible, pero aparte de estar jugando con ingredientes vegetales muy sanos, los sabores se integran perfectamente. Quizás, lo más laborioso sea el hacer las albóndigas, aunque si tenéis un poco de práctica veréis que no es nada complicado. ¡Ah! Por cierto, en esta ocasión hemos usado un curry verde aunque podría haber sido rojo, amarillo… En fin, depende del gusto que le queramos dar porque ya se sabe: Para gustos, colores.

INGREDIENTES PARA CUATRO PERSONAS

300 g de migas de merluza sin espinas.

100 g de miga de pan.

1 Huevo.

Harina.

Un trozo de jengibre.

2 dientes de ajo.

2 Limas.

20 ml de caldo de pescado.

2 cucharadas de pasta (o polvo) de curry verde.

1 Puñado de bimi.

6 Mazorquitas de maíz en vinagre

Alcaparras.

1 Chile rojo.

Sal.

Pimienta negra molida.

Aceite de girasol.

ELABORACIÓN

Comenzamos elaborando las albóndigas. Para ello, ponemos en un bol el pescado, junto con la miga de pan en trocitos, previamente en remojo y escurrida, el huevo y un poco de sal y pimienta. Trabajamos la masa hasta que podamos hacer una bolas compactas del tamaño de una pelota de golf. Si vemos que la masa queda muy suelta añadimos más huevo y miga de pan para que ligue bien. Una vez tengamos las bolas bien compactas, las pasamos por harina y las freímos en aceite muy caliente hasta que comiencen a dorarse. Retiramos y reservamos sobre papel absorbente. Ahora, en una cazuela a fuego suave con un poco de aceite vegetal, vamos a echar el ajo muy picado sin que llegue a tomar color, el jengibre rallado, el chile picado, el curry verde y terminaremos añadiendo el zumo de una lima y el caldo de pescado. Cuando comience a hervir añadimos las albóndigas y dejamos reducir el caldo hasta obtener una consistencia de salsa. Ya sólo nos queda hervir el bimi un par de minutos, escurrir y añadir junto con un puñado de alcaparras y las mazorquitas bien secas a la cazuela.

PRESENTACIÓN

En una bandeja ponemos las albóndigas, salseamos y terminamos con dos medias limas plancheadas. Podemos poner un poco más de chile o guindilla roja al gusto. ¿Quién dijo que el canalleo no se lleva bien con lo saludable?

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