BACALAO A LA PORTUGUESA (EXPRÉS)

En muchas ocasiones escuchamos eso de “para comer bacalao, como en Portugal en ningún sitio”. Pero, ¿nos hemos parado a pensar cuál es la fórmula del éxito? La verdad, es que la receta que traemos hoy, no tiene una gran elaboración ni es complicada. ¿Entonces? El secreto está en la calidad de la materia prima y el desalado. Encontrar unos buenos lomos de bacalao, ya de por sí en complicado, y el desalado va a tener que ser en agua fría y dependiendo del grosor de la pieza, nos puede llevar hasta 48 horas o más. Con las prisas con las que vivimos, nos resulta difícil planear una comida con dos o tres días de antelación y si se apuntan invitados de última hora, nos pueden fastidiar el menú. Ahora, desde que he descubierto los lomos de bacalao desalado que venden en la pescadería de los Gadis, improvisar la elaboración a la portuguesa es cosa de 20 minutos. La calidad y el tamaño de las tajadas es excelente y el punto de desalado, es idéntico al que encuentro en los mejores sitios de Portugal. Dicen que en el país vecino tienen 365 recetas de bacalao, para comerlo de manera distinta todos los días del año. Yo os dejo aquí una de ellas, que además de ser sencilla y rápida es una de mis favoritas.

INGREDIENTES PARA DOS PERSONAS

2 Tajadas de lomo alto de bacalao fresco desalado

1 Bolsa de patatas para cocer en el microondas

1 Cebolleta

1 Lata de aceitunas negras

Perejil

AOVE

ELABORACIÓN

En primer lugar, ponemos las patatas en el microondas, y las hacemos siguiendo las instrucciones del fabricante. Generalmente hay que darle entre 8-10 minutos de tiempo a máxima potencia. Una vez cocidas las patatas, en una sartén, apta para horno (ojo con el mango), ponemos un poco de AOVE en el fondo y colocamos el bacalao con la piel para arriba junto con las patatas. Regamos con un poco de AOVE e introducimos en el horno, precalentado a máxima potencia, hasta que comiencen a dorarse las patatas. Esta operación nos va a llevar de 15 a 20 minutos así que, aprovechamos para cortar la cebolleta en rodajas y picar el perejil. Es importante que se a cebolleta para que no tenga el sabor muy fuerte. No obstante, si nos resulta fuerte, la podemos meter en agua y dejarla en el frigorífico una hora antes.  Ya sólo nos queda retirar la sartén del horno con cuidado de no quemarnos, poner los aros de cebolla, regar con un buen AOVE y terminar espolvoreando el perejil y poniendo unas aceitunas negras bien escurridas.

PRESENTACIÓN

En la misma sartén, con un buen aceite de oliva extra virgen al lado, pues a medida que lo vayamos exfoliando y cortando las patatas, le va fenomenal añadir un poco. ¡Ah! Y si ponemos un fado y cerramos los ojos, nos habremos trasladado al Portugal más profundo en sólo 20 minutos.

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